+ Dígame que ocurre..

- Verá, ella dice que está enferma,pero yo no creo que necesite un médico. A ella lo que le duele es el corazón de amarle tanto como lo hace. Le duele la cabeza de pensar en él,de barajar las hipótesis de porqué todo se ha acabado,qué falló. Casi no le funcionan las piernas porque solo saben ir hacia donde está él. Es extraño,porque casi ni habla,solo pronuncia las palabras justas para que nadie le pregunte la verdadera razón de porque está así. Le tiritan los labios del frío que pasa fuera de sus brazos. Y sus ojos... que le voy a decir de esos grandes ojos marrones. Antes rebosaban alegría, de amor en las retinas y ahora,los cierra porque le escuecen,los cierra para evitar que se desborden las lágrimas.

Le tiembla el alma,se le nota en la ausencia de su sonrisa,en sus gestos,en su voz. No sé cuanto durará, ni que..

+ No se preocupe. Tiene un virus,pero uno de esos que ni yo siendo médico,ni nadie puede curar. El amor le ha invadido el cuerpo,el corazón y el alma para luego un buen día,desvanecerse, perdiendolo así todo. Es muy fácil contraerlo,pero es como una droga.

Ahora le quedan las secuelas de algo que ya no está y eso quizás es lo que más duele. La ausencia.