Sé que ahora tienes esa extraña sensación de que el mundo te ha dado la espalda, que acabó con toda tu ilusión. Sé que parece que el mundo se derrumba y toda palabra que llegue a tus oídos te sonará a tristeza o rareza, incluso a olvido. Sé que te sentirás sola sin estarlo, que necesitarás escuchar palabras de corazón y algún que otro ‘te quiero’ de más. Sé que parece que el mundo no te entiende, que la rara eres tú, o quizás son ellos, pero existe alguna rareza, que parece que les hablas en chino cuando hablas de cosas que te gustan o pretendes conseguir. Sé que te encantaría gritar al mundo que esas son tus metas, que no piensas cambiarlas por nadie, que te ves de aquella manera cuando cierras los ojos. Sé que es difícil hacerte sonreír hoy, que es complicado. Pero ahora siéntate y háblame de lo que quieras que yo tan solo escucharé.