♪.

sábado, 8 de enero de 2011

En la vida es necesario tener grandes esperanzas. Si no las tienes nunca obtendrás más que una vida completamente normal. Una vida basada en la mediocridad y en la cadencia de emociones.A su vez, aunque parezca contradictorio, es necesario luchar por conseguir esas grandes esperanzas. Porque si no luchas por que lleguen a tí, ellas solas nunca lo harán. Se quedarán quietas e irán a parar a otra persona que dedique su vida a luchar por ellas.A lo largo de su vida había adquirido una cantidad relativamente minúscula de sus propias grandes esperanzas. A menudo llegaba a preguntarse a sí misma si ella y esas grandes esperanzas formarían imanes que se repelían. Sin embargo nunca perdió las ganas de luchar por esas esperanzas, y un día, cuando estaba al límite de sus fuerzas, las grandes esperanzas llegaron a ella.Fue entonces cuando se dio cuenta de que la vida nos doblega y nos hace sufrir hasta el último momento. La vida nos golpea y nos hunde, y os puedo garantizar que solo los valientes saben seguir pese al sufrimiento. Solo los valientes saben como soportar sus golpes y seguir luchando por sus grandes esperanzas.
Si, podriamos decir que la vida es una gran anécdota.

No te escupo en la cara porque sé que la vida lo hará mejor que yo


Haz que se pregunten por qué sigues sonriendo.


Mírame, ¿cres que tengo ganas de perder el tiempo contigo?


¿Tú que vas de flor en flor?
No, yo voy de capullo en capullo.
-¿Qué te pasa?, ¿es la regla?
-Y tu cara de gilipollas, ¿es de nacimiento?


-Sé que te pongo.
-Que me pones ¿qué?¿Enferma?

Seguidores

aiomáqerico!

aiomáqerico!